av Juan Moises de la Serna
269,-
Desde entonces todo cambió, y creo que fue gracias a ello en esos momentos, que cuando no habían pasados ni dos días, el jefe nos citó a los dos en su despacho y nos propuso un nuevo trabajo, no tuve ninguna duda, dije si, estaba ya preparada para seguir mi camino, sin ataduras al pasado, sin volver la cabeza para atrás, podía ya lo creo que podía.Mi tierra siempre estaría en su sitio, y dentro de mis recuerdos, tendría ese huequito especial, eso nunca nadie me lo iba a quitar, pero tenía que continuar con mi vida, esa que ahora se me ofrecía, y cuando el jefe nos propuso, porque eso fue, no fue una orden, nos sugirió la importancia de aquello, desde ese día, él sabía que podía contar con nosotros para cualquier desplazamiento, por muy complicado que resultara, todo por el bien del servicio.Esa decisión nos ha llevado a recorrer rincones que de otra forma nunca, nunca los habríamos visitado, quien hubiera echo esos trabajos, pues posiblemente otros compañeros, eso no lo sé, pero de lo que sí que estoy segura es de que nosotros, no habríamos tenido ni en el mejor de los sueños oportunidad de conocerlos.Gracias jefe.